Ayer tuvimos tarde galleteril con unos compañeros blogueros, y yo tenía que hacer la rosa que en su día hice para decorar la tarta Red Velvet de rosas. Pero como ya sabemos, las prisas, o tener que hacer cincuenta mil cosas a la vez, no son muy buenas amigas de la cocina, y el buttercream que siempre sale perfecto, me pase batiendolo, pensé que se arreglaría, mejor dicho eso era lo que yo quería, así que la rosa no se pudo hacer. Pero por cabezota no será, y hoy lo primero que he hecho es hacer de nuevo buttercream y decorar los muffins que trajo Rosilet, y que están insuperables.
Ingredientes buttercream de Philadelfia: (para unos 12)
100 gr.de mantequilla sin sal
100 gr. de queso Philadelfia
400 gr. de azúcar glas
2 cucharadas de nata para montar
1 cucharadita de extracto de vainilla
1 cucharada de zumo de limón colado
Elaboración:
Los ingredientes tienen que estar a temperatura ambiente.
- Batir la mantequilla y el queso con unas varillas a velocidad media hasta que queden totalmente integrados, mezclar aproximadamente un minuto.
- Tamizar el azúcar y añadirlo poco a poco, batir a velocidad baja, hasta tener una crema homogénea.
- Verter las cuchardas de nata y seguir batiendo, agregar la vainilla, batir, añadir el zumo de limón, y volver a batir hasta que esté montado y tenga una textura esponjosa, aproximadamente tres minutos.
Y después de conseguir un buttercream perfecto, he grabado como he hecho la rosa, con la boquilla 2D de Wilton, ¿a que es fácil?
Y ahora os dejo unas fotos de la que liamos, para la receta de la masa de las galletas y la glasa, pinchar aquí.
Hicimos galletas: Rosilet, Caty, Juana, Cristina, Macu, Teresa, Loli (que nos cedio amablemente su rincón para que lo llenaramos de azúcar), una servidora, y algunos de los peques que no hicieron siesta y disfrutaron también de lo lindo dibujando sus galletas.
He cogido las fotos de Teresa y Juana que son preciosas.
Teniamos galletas de todos los diseños, tamaños y hasta de colores.
La que teniamos liada...
El tema, la Navidad, que la tenemos a la vuelta de la esquina.
Y Teresa nos trajo unos cupcakes a los que se está aficionando, y nosotros disfrutando,que hasta los que en casa están a dieta no pudieron resistirse en cortar un trocito... deliciosos.
María.
