Se preparan en poco tiempo, y se puede tener listos con antelación, e incluso como yo hago, congelarlos separados en una bandeja, pasarlos después a una bolsa de congelar etiquetada, y listos para sacarnos de un apuro, ya que no es imprescindible que estén descongelados con anterioridad.
Solo hay un "pero", como son -minis-, y si los que se sientan alrededor de la mesa están hambrientos, necesitaréis unos cuantos, ya que se comen practicamente de un bocado.
Ingredientes:
solomillo de cerdo limpio de grasa
jamón de york
lonchas de queso que se funda bien (gruyere)
sal
harina
huevo
pan rallado
aceite para freír
Elaboración:
- Cortar en "libritos" finitos el solomillo, secar bien con hojas de papel de cocina.
- Cortar las lonchas de jamón de york y de queso de la misma medida de los libritos abierto. Colocar encima de cada librito un trozo de jamón de york y uno de queso. Doblar por la mitad y presionar con la palma de la mano para que se peguen.
- Sazonar ligeramente con sal el exterior de los libritos y rebozarlos primero en harina, luego en huevo y por último en pan rallado.
- Es preferible dejarlos reposar 30 minutos para que se afirme el rebozado. Freírlos en aceite bastante caliente hasta que estén dorados por ambos lados.
- Sacar y dejar escurrir el aceite sobrante sobre papel absorbente.
Acompañar con patatas fritas o ensalada.
* Los originales Cordon Bleu se preparan con filetes de ternera finos y grandes, y es conveniente secarlos entre dos hojas de papel de cocina y aplastarlos un poco con el mazo hasta dejarlos bastante finos.
María.