Creo que los huevos son uno de los ingredientes que más preparaciones admiten, son baratos, nutritivos, y si los tienes caseros como es mi caso, se nota la diferencia. Se cocinan deprisa, sobre todo los huevos fritos, casi mejor al plato, los pones en el horno y mientras pones la mesa ya los tienes listo.
El tener que organizar los menús semanales con anticipación para abastecerme con la mayoría de los ingredientes y evitarme así tener que pasar por el super lo menos posible durante la semana, no por eso dejo de sorprenderme la organización de mi suegra cuando la conocí. Sus menús semanales eran cada semana los mismos, menús equilibrados, cada semana legumbres, pasta, caldos..., pero eso sí, cada día de cada semana no hacía falta preguntar que había para comer, se sabía de antemano, todos los lunes, lentejas, todos los martes, macarrones..., todos los domingos, por supuesto paella, pero lo más curioso del caso es que al comentarlo, me he dado cuenta que no era la única familia que tenía tan organizados los menús de la semana.
Y los domingos para cenar..., libertad, cada uno se preparaba lo que quería, así que los huevos al plato era el menú de todosss los domingos noche de mi marido, solo que con multitud de variaciones, ya que admite todo lo que quieras añadir y se cocina en pocos minutos.
Los huevos al plato son los más sencillos porque se sirven en la misma cazuelita en la que se hacen, de ahí viene su nombre.
Ingredientes: (para una persona)
2 huevos
un chorrito de aceite
un trozo de sobrasada
sal, pimienta
Elaboración:
- Untar con un poco de aceite el plato refractario. Precalentar el horno a 180º.
- Cascar los huevos uno a uno en una taza y pasarlos a la cazuelita, sazonar solamente con sal y pimienta. Quitar la piel de la sobrasada repartirla en "el plato".
- Taparlos con papel de aluminio, con lo que se retiene un poco de vapor que ayuda a cocinar ligeramente los huevos por arriba.
- El tiempo exacto que tardan en hacerse los huevos depende del recipiente. Las cazuelitas de material más gruesos absorben mucho calor y, se hace antes, tenemos que cogerle en punto según nuestra cazuelita, en mi caso en 5 min. estaban listos.
NOTA: Mi experiencia en talleres con adolescentes me ha demostrado que no es tan fácil como nos parece cascar un huevo, no todo el mundo puede cascar huevos crudos con la naturalidad de un mago, del modo que caigan en el plato sin que se rompan las yemas ni se llenen de cáscaras. Tampoco hace falta intentarlo, es más sensato cascar los huevos uno a uno en una taza, dándole un golpecito por el centro contra el borde de la taza, o bien, dar un golpecito por arriba con el filo de un cuchillo, con lo que se evita desperdiciar los huevos ya cascados si uno saliese estropeado.
María.